Kicillof lanzó un programa educativo en cárceles con el objetivo de "reducir la reincidencia"

El Programa es una iniciativa para fomentar la reinserción social, evitar la reincidencia y fortalecer la seguridad pública.

BUENOS AIRES 17/11/2022
Kicillof lanzó un programa educativo en cárceles con el objetivo de "reducir la reincidencia"
Kicillof lanzó un programa educativo en cárceles con el objetivo de "reducir la reincidencia"

El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, lanzó hoy el Programa Educativo en Contexto de Encierro 2023, en la Unidad Penitenciaria Nº58 de Lomas de Zamora, donde aseveró que la iniciativa apunta a que las personas privadas de la libertad "tengan la posibilidad de tener una vida distinta" y a reducir la reincidencia en el delito.

"Asumimos con una tasa de reincidencia del 45% y hoy es del 22%. El objetivo es seguir reduciéndolo. No es un tema sólo de derechos humanos o educativo, sino también de seguridad publica. Las cárceles no pueden ser lugares de tormento, sino de esperanza, de futuro y de oportunidades. Es así que quienes cumplen su condena tendrán la posibilidad de tener una vida distinta", planteó el mandatario bonaerense durante su discurso.

El gobernador estuvo acompañado por su jefe de Gabinete, Martín Insaurralde; el ministro de Justicia y Derechos Humanos de la provincia, Julio Alak; el director general de Cultura y Educación, Alberto Sileoni; el jefe de Asesores, Carlos Bianco; la ministra de Ambiente, Daniela Vilar; y el presidente de la Cámara de Diputados de la legislatura bonaerense, Federico Otermín.

El Programa es una iniciativa conjunta entre el Ministerio de Justicia y el de Educación, que prevé la puesta en marcha y la construcción de Centros de Formación Educativa y Laboral para fomentar la reinserción social, evitar la reincidencia y fortalecer la seguridad pública, según informaron fuentes oficiales.

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Ese plan se lanzó en el marco del plan "Más Inclusión, Menos Reincidencia", que incluye la construcción de cinco escuelas nuevas en las unidades, de 58 bibliotecas, de cuatro polos industriales de fabricación de mobiliario escolar; y uno textil para la producción de indumentaria docente y educativa.

"Los antecedentes de este programa de transformación penitenciaria no se limitan a los cuatro años del gobierno anterior, ya que había problemas estructurales. Pero sí podemos decir que en ese gobierno, el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) estuvo en retroceso: había huelga de hambre porque no pagaban los alimentos ni los medicamentos y había sobrepoblación", recordó Kicillof.

En ese marco, el mandatario recalcó que tanto la Constitución, como las leyes y los tratados internacionales a los que adhiere la Argentina "dicen que el castigo (a los presos) debe estar en condiciones de encierro" pero ello no implica que deban padecer "condiciones inhumanas, tormentos, ni torturas".

"Recibimos un sistema en condiciones pauperizadas, con enormes deudas y huelgas. Todo porque se había ampliado la cantidad de internos en el sistema y hubo un récord de 51 mil detenidos. Suponían que encarcelando, iban a mejorar las estadísticas de seguridad, pero no es lo que ocurrió. Hubo cada vez más internos, pero cada vez más reincidencia", resaltó.

En ese sentido, Kicillof evaluó que la política penitenciaria de María Eugenia Vidal "fue un absoluto fracaso", y recordó que en esa gestión hubo "16 mil nuevos internos, pero no se construyeron" nuevos espacios carcelarios.

"Fue una calamidad porque subió la tasa de reincidencia y quien recuperaba la libertad, en vez de reinsertarse en la sociedad, volvía a delinquir. Para mejorar el hacinamiento, había que ampliar la capacidad del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), haciendo cuantiosas inversiones y agrandando el sistema formativo. Por eso decidimos encarar el problema e intentar solucionarlo", apuntó.

Posteriormente, expresó que "había formación laboral y talleres en cárceles" y contó que su gestión "inauguró la primera fábrica dentro de una cárcel" ya que desde el peronismo se cree que el trabajo es un "articulador social" que cumple un "papel central para transformar la sociedad".

"Esto es muy novedoso y traerá enormes cambios para los internos e internas, pero también para la sociedad. Esto tiene que ver con nuestras convicciones profundas: es una cuestión de justicia social", planteó Kicillof.

Luego, Sileoni dijo que "la situación de encarcelamiento o la pena" que cumplen los internos, "no suprime los derechos humanos", destacó la necesidad de "formación" de los presos y dijo que ello contribuye "a evitar la reinserción".

"Tenemos 100 servicios educativos en las cárceles con 24 mil estudiantes", prosiguió y afirmó que se construirán 5 escuelas en unidades penitenciarias, "con bibliotecas y miles de libros".

"A algunos les llega el Estado punitivo antes que el sanitario o educador. Este gobierno no mira para otro lado. Ahí tiene que haber un Estado atrás porque el pasado es irreversible, pero para el futuro puede haber un proyecto de vida con trabajo y educación", cerró.

En tanto, Alak manifestó: "Estamos haciendo realidad una profunda transformación del Sistema Penitenciario Bonaerense", rememoró que el gobernador Kicillof recibió el sistema "inmensamente superpoblado" y con "una huelga de hambre" de las personas privadas de la libertad "y, en vez de esconder el problema, se puso al hombro esa crisis y llevó adelante el plan de infraestructura más grande de la historia".

"Queremos que el tiempo de pena no sea un tempo perdido, sino de formación y reflexión. El desafío es que los internos no vuelvan a estar acá, que tengan trabajo y sean felices. Esta es la manera más inteligente de mejorar la reincidencia", concluyó.

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