Italia: renunció el premier Giuseppe Conte y acusó a Salvini de “irresponsable”

INTERNACIONAL 20/08/2019

Lo expresó en un duro discurso ante el Senado. El escenario pasa ahora a manos del presidente Mattarella.

Antes de consignar su dimisión como primer ministro al presidente de la República, Sergio Mattarella, Giuseppe Conte, 55 años, hizo el anuncio de su renuncia en el debate en el Senado, en el que su discurso fue una arenga contra el “irresponsable” líder populista y ministro del Interior, Matteo Salvini, sentado a su lado en la bancada del gobierno.

Conte hizo una larga lista de acusaciones contra Salvini, quien el 8 de este mes desde una playa veraniega anunció que su partido la Liga quitaba la confianza al gobierno encabezado por Conte para hacer precipitar al país en la crisis política y el llamado inmediato a elecciones anticipadas.

“No tenés cultura de las reglas”; “has perseguido intereses personales”; “nunca aclaraste que pasó con los rusos” (Salvini está acusado de recibir financiación del presidente Putin). Y más todavía: “Me preocupa tu concepción del poder”. También, “el uso inconciente de los símbolos religiosos”.

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Desde su asiento, Salvini respondió haciendo movimientos con las manos o diciendo que no con la cabeza, mientras en el aula del Senado se desataba una batahola.

“Aquí se acaba el gobierno”, dijo Conte. Afirmó que el gesto de Salvini fue “particularmente grave” porque interrumpió la acción de un gobierno que “en un año ha producido muchos resultados” y porque “mandó en humo” el proyecto de cambio “que emergió de las urnas el 4 de marzo de 2018”, cuando triunfaron los dos partidos populistas que formaron el gobierno ahora difunto por voluntad del líder de extrema derecha.

Conte acusó a Salvini de haber puesto en crisis al gobierno justo en el momento delicado “con las instituciones europeas, cuando estamos en tratativas con la Comisión Ejecutiva, a la que Italia se presenta inevitablemente debilitada”.

Conte no le ahorró ninguna critica demoledora a Salvini. “Ha sido irresponsable la decisión de detonar una crisis de gobierno. El ministro del Interior demostró seguir intereses personales y de partido”.

El ex Hombre Fuerte soberanista y populista lidera ampliamente los sondeos, que pronostican que si hubiera elecciones inmediatas obtendría una victoria aplastante y volvería al gobierno como primer ministro. Salvini, en estos últimos dos meses, ha pedido “poderes especiales” “al pueblo”, como hizo Benito Mussolini en 1922, dando comienzo a la dictadura veintenal del fascismo.

Conte cargó las tintas afirmando que “los comportamientos de las últimas semanas del ministro del Interior, revelan escasa sensibilidad institucional y una grave carencia de cultura constitucional”.

Dijo que el gobierno trabajó “intensamente” y acusó a Salvini de haber “oscurecido” y “ofuscado” el trabajo realizado.

“Promoviendo esta crisis de gobierno, Matteo, te has asumido una gran responsabilidad frente al país. Has pedido plenos poderes y has invocado las plazas (el apoyo popular) en tu apoyo. Tu concepción me preocupa. Las cuestiones institucionales se regulan en el Parlamento.”

El primer ministro también introdujo el tema quemante del escándalo por las acusaciones, que investiga la justicia, de que Salvini y su partido reciben abundante financiación de la Rusia del presidente Putin, que es gran mecenas en Europa de todos los partidos de extrema derecha soberanistas, con el fin de debilitar al máximo la unidad de los 27 países de la Unión.

“Si hubieras venido al Senado a referir acerca de este asunto, que debe ser aclarado también por sus reflejos internacionales, habrías evitado problemas a tu primer ministro”.

Conte acusó también a Salvini de “invadir la competencia” de otros ministros, porque el líder de la Liga nunca aceptó limitarse a sus funciones ministeriales. También dijo que muchas veces criticaba a otros ministros “violando la cultura de las reglas”.

Salvini se presenta con frecuencia en sus actos políticos mostrando rosarios, símbolos de Cristo y la Virgen María. El premier dijo que nunca le agradó esta relación de los eslóganes políticos y símbolos religiosos, considerándolos “episodios de inconciencia religiosa” que arriesgan ofender el sentimiento de los creyentes y oscurecer el principio de laicidad “que es un rasgo fundamental del Estado moderno”.

“La crisis compromete la acción de este gobierno que aquí termina”, apuntó Conte. “Pero es necesario seguir adelante, hace falta proyectar el futuro”.

Interrumpido numerosas veces por la batahola, el discurso del primer ministro renunciante duró una hora y en la parte final se convirtió prácticamente en el vademecum de un programa gubernamental. Señal que Giuseppe Conte quiere durar a través de un segundo mandato para formar un segundo gobierno.

Matteo Salvini abandonó su banca en el área de gobierno para responder al premier Conte y ocupó su asiento de senador. “No tengo miedo”, comenzó; y lo repitió varias veces.

Salvini equivocó tiempos y modos al hacer detonar la crisis y se encontró encastrado en la falta de una mayoría parlamentaria y la formación de una línea de resistencia para dar vida a un gobierno alternativo a las elecciones anticipadas de otras fuerzas políticas.

Por eso pasó de la intransigencia a intentar reanudar el diálogo con el Movimiento 5 Estrellas y reconstruir el gobierno que él destruyó.

Esto explica sus palabras al responder a Conte. Alzó la puesta en juego y propuso votar la reducción de los parlamentarios, como reivindican los 5 Estrellas y recién después ir al voto.

“Volvería a hacer todo lo que hice, soy un hombre libre y no tengo miedo del juicio de los italianos”.

Salvini atacó a sus ex aliados de gobierno acusando al Movimiento 5 Estrellas de negociar una potencial alianza con el partido Democrático. Ambos partidos, más otras fuerzas menores, tienen mayoría en el parlamento para formar un nuevo gobierno.

Salvini reivindicó haber convocado a las organizaciones sociales en el ministerio del Interior, que le reprochó momentos antes el primer ministro Conte. “Lo hice porque no los escuchaba ninguno”.

“Los italianos quieren crecer”, dijo al criticar los continuos “no” de los ministros del Movimiento 5 Estrellas a sus propuestas, lo que hizo estallar una nueva batahola en el aula.

Al final, Salvini lanzó una oferta a sus ex socios. Dijo que si no es cierto que están buscando un acuerdo de poder y repartijas con el partido Democrático y quieren terminar el “camino virtuoso” del gobierno que derrumbó, “nosotros no tememos miedo, estamos dispuestos a recomenzar”.